Title: Vida Sobrenatural-Gracia Santificante
1Para Salvarte
P. Jorge Loring
Vida Sobrenatural
2Gracia Santificante
- Dios hizo al hombre a su imagen y semejanza,
dándole un alma espiritual e inmortal, capaz de
conocerlo, de amarlo y de alcanzar una felicidad
proporcionada a su naturaleza nos dio la
dignidad de ser hijos suyos. - La Iglesia es el Cuerpo MÃstico de Cristo
- Él es la Cabeza y todos nosotros somos sus
miembros.
3Las acciones de los hombres que no están en
gracia de Dios, aunque tengan su valor, no
rebasan los lÃmites de lo humano.
En cambio, cuando un hombre está en gracia de
Dios es miembro del Cuerpo MÃstico de Cristo sus
obras, por sencillas que sean, pertenecen a un
plano sobrenatural, infinitamente superior a todo
lo humano.
4Cada uno de nosotros es una célula del Cuerpo
MÃstico de Cristo. Con nuestra virtud
contribuimos a su vitalidad. Con nuestros
pecados, además de convertirnos en células
muertas o cancerosas, entorpecemos la vida de las
otras células, nuestros hermanos.
5La gracia santificante
Es una cualidad que hace subir de categorÃa al
hombre, dándole como una segunda naturaleza
superior.
Es un don personal sobrenatural y gratuito, que
nos hace verdaderos hijos de Dios y herederos del
cielo. Es la vida sobrenatural del alma.
6Se llama también gracia de Dios y es lo que más
vale en este mundo .
Nos hace partÃcipes de la naturaleza divina, pero
no nos hace hombres-dioses como Cristo, que era
Dios, y por Su naturaleza humana participaba de
la personalidad divina, lo cual no ocurre en
nosotros .
7Dios, al hacernos hijos suyos y partÃcipes de su
divinidad, nos pone por encima de todas las demás
criaturas, que también son obra suya, pero no
participan de su divinidad. Cuando vivimos en
gracia santificante somos templos vivos del
EspÃritu Santo. La gracia santificante es
absolutamente necesaria para conseguir la vida
eterna.
8La gracia se pierde por el pecado grave.
Estando en pecado mortal no se puede merecer
nada. Quien ha perdido la gracia santificante,
no puede vivir tranquilo, pues está en un peligro
inminente de condenarse. La gracia santificante
se recobra con la confesión bien hecha, o con un
acto de contrición perfecta, con propósito de
confesarse.
9Perder la gracia santificante, es la mayor de las
desgracias , aunque no se vea a simple
vista. Sin la gracia de Dios, toda nuestra vida
es inútil para el cielo. Por fuera sigue igual,
pero por dentro no funciona como una bombilla
sin corriente eléctrica. Esta vida es el camino
para la eternidad. Y la eternidad, para nosotros,
será el cielo o el infierno.
10Sigue el camino del cielo el que vive en gracia
de Dios.
Además de la gracia santificante, Dios concede
otras gracias que llamamos gracias actuales
son auxilios sobrenaturales transitorios, dados
según las necesidades individuales, para
conseguir algo determinado en orden a la
salvación.
Sigue el camino del infierno el que vive en
pecado mortal.
11Pues por nosotros mismos nada podemos. El hombre
no puede cumplir todas sus obligaciones sin la
ayuda de la gracia de Dios. Pero como Dios
quiere la salvación de todos los hombres, a todos
les da la gracia suficiente que necesitan para
alcanzar la vida eterna. Dios ha querido darnos
el cielo como recompensa a nuestras buenas obras.
12Sin ellas es imposible conseguir la salvación
eterna. Al que hace lo que puede, Dios no le
niega su gracia. Tan grande es la bondad de
Dios con nosotros, que ha querido que sean
méritos nuestros lo que es don suyo. Esta
gracia, la obtenemos mediante la oración y los
Sacramentos.
13Dice San Pablo "O no saben que sus cuerpos son
templo del EspÃritu Santo, que habita en ustedes
y que han recibido de Dios? Por lo tanto, ustedes
no se pertenecen, sino que han sido comprados, y
a qué precio! Glorifiquen entonces a Dios en sus
cuerpos", (1a. Cor. 6, 19-20).