Title: PAUSA
1La orquesta de Dios
Con el paso de los años, he comprendido que Jesús
me trazó este camino, no puedo ya ver mi vida sin
advertir una Mano invisible que la guía. Es que
es tan extraña la vida! Uno mira hacia atrás, y
ve los cambios, éxitos y fracasos, y hay que ser
realmente ciego para no ver la mano de El
imponiéndose a nuestras propias desventuras, a
nuestros propios errores. Jesús obra sobre
nuestras debilidades, construye permanentemente
sobre nuestra insistencia en fallar. Qué
inmenso amor tiene por cada uno de nosotros, que
no deja jamás de esforzarse y volver a replantear
las cosas de nuestra vida, después de que una y
otra vez le fallamos! El no abandona Sus
esfuerzos de Salvación hasta el último instante
de nuestro existir.
2Pero también, finalmente, he comprendido que El
me puso aquí y ahora, por algo, y no debo
resistirme. Nada es casual en nuestra vida, en
lo que hace a las grandes pinceladas, las que
labran nuestro camino, ya que El tiene parte
central en la fijación de nuestro derrotero.
Así, aceptando que mi hoy, mi vida actual tiene
de algún modo un sentido profundo para Su
Voluntad, me planteo cuan importante es entender
qué debo hacer de aquí en adelante, cual es mi
misión de vida, si es que deseo hacer la Voluntad
de mi Divino Maestro.
3Con el ánimo de escudriñar un poco en el misterio
que representa el descubrir nuestra misión en
este mundo, les propongo ver la vida como una
orquesta, una enorme orquesta en la que cada uno
de nosotros es un instrumento. Por designio de
Dios nos toca ser un instrumento en particular
dentro de esta orquesta, ya sea un violín, un
bombo, un platillo, un piano, o quizás un oboe.
Nuestro desafío de vida es, naturalmente, que la
orquesta suene majestuosa y armoniosamente,
interpretando a la perfección la Partitura que el
Autor de la obra creó. El Director de la
orquesta, frente a nosotros, nos indica los
tiempos y las intensidades de cada intervención
que nos toque realizar, guiando a cada uno en
perfecta unión con cada nota musical impresa en
el pentagrama.
Que maravillosa muestra de perfección es una
orquesta interpretando una buena obra!
4Pero, nuestra orquesta es una Orquesta Divina,
porque es Jesús el que escribió la Partitura, es
el Espíritu Santo el Director que la guía, y por
supuesto es Dios Padre quien nos creó como
instrumentos de Su Orquesta. Así, el secreto en
la vida es descubrir qué instrumento somos, y
sonar en perfecta unión y armonía, para servir a
la orquesta toda!
Que triste es para el Director que uno sea bombo,
y piense que es violín, y se esfuerce en ser
violín. Pero también es triste saberse violín, y
ser violín, y sonar como un violín desafinado. .
.
Pero no hay nada más espantoso que no obedecer al
Director de la orquesta, es más, ni siquiera ver
o saber que hay un Director!, aunque uno suene
como un buen instrumento.
5 Lo que trato
de decir es que cada uno de nosotros tiene un rol
en esta vida,
dentro del Plan de Dios. Y seguramente ese rol
se relaciona muy directamente con lo que
somos, con lo que hemos aprendido, con los
seres que nos rodean, con nuestra historia
familiar y personal, y también con
nuestro presente. No hace falta mirar
muy lejos, o tratar de ser muy
distintos a lo que somos, para
descubrir nuestra misión de vida.
En realidad, hay que darse cuenta de
que somos un violín, de que Dios nos hizo violín,
sentir felicidad de serlo, agradeciendo al
Luthier Celestial que nos creó violín. Y luego,
sonar majestuosamente, al servicio de la
Orquesta y de la ejecución de la Obra! Desde
nuestro lugar, en la ubicación que Dios le asignó
a los violines, y a éste violín en particular.
6Ahora, mírate, amigo violín. Siéntete un
Stradivarius, el mejor violín jamás creado, pero
siéntete un violín espiritual. Deja que el
Director de la Orquesta te guíe, sigue con
atención las Escrituras (perdón, las
partituras!), y hazte parte de la maravillosa
obra de Dios.
7Que sonrían los Ángeles al escucharte sonar, y
que el Señor, con una sonrisa y con brillo en
Sus Ojos, se alegre de verte finalmente unido a
Su Orquesta
Y que tú, hermoso amigo violín afinado, te
sientas feliz de haber finalmente encontrado a tu
orquesta
8(No Transcript)