Title: Apresentao do PowerPoint
1Cuando oía la campana a mediodía, siempre me
acordaba de las palabras de mi madre y,
dondequiera que estuviese, rezaba el Ángelus.
2Un día llegó llegó mi tío y me propuso retomar
los estudios. Imaginaos mi alegría al poder
aceptar esta propuesta, volver a casa y abrazar a
mi madre.
3Para estudar, debía recorrer, cada día, 16 km a
pie. Y muchas veces con lluvia, nieve, viento...
4- Vete a dormir, Juanito. Es tarde.
- Espera un poco más, mamá. Tengo que terminarlo.
5Así hasta que encontré una familia que me
acogiese. Cuando mi madre venía a traerle algo al
dueño, éste no lo quería aceptar por mi buena
conducta...
6Otro año continué mis estudios en la ciudad de
Chieri, con miras a ingresar en el seminario. La
Providencia llegó a mi casa a través de muchos
donativos...
7Dejé a mi familia, para pasar al segundo ciclo.
Me sustentaba a base de varios oficios...
8Muchos amigos se acercaban a mí. Con ellos
comenzé un grupo la Sociedad de la alegría,
con el objetivo de unir a los buenos amigos.
9- Juan tú sigue con su vocación! Pero acuérdate
de lo que te digo, como te vuelvas un sacerdote
rico no cuentes con que vaya a visitarte nunca.
10Depués de tantas dificuldades y estudios, a los
26 años, fui ordenado sacerdote. Fui un día
dichoso para mi madre, que recibió el Cuerpo de
Jesús de manos de su hijo.
11Por la noche, después de las celebraciones, a
solas me dijo mi madre - Recuerda, Juan, que
comenzar a decir misa es comenzar a sufrir.
12Al comienzo de mi vida sacerdotal, tuve de nuevo
aquel sueño de los 9 años Éste es tu campo,
aquí debes trabajar Sólo esperaba la oportunidad
para empezar...
13Fue el 8 de diciembre de 1841, cuando encontré al
primer joven pobre y avandonado, en la sacristía
de una iglesia de Turín Bartolomé Garelli.
Comezó el Oratorio.
14El Oratorio se volvió casa que acoge, parroquia
que evangeliza, escuela que encamina para la vida
y patio para encontrarse con amigos y vivir en
alegría.
15Agotado por el gran trabajo entre los jóvenes,
tuve que recuperarme en mi casa, com mi nmadre.
Lleva a tu madre contigo, me sugirió el
párroco. Y aceptó.
16- Ésta es nuestra nueva casa!
- Para mi madre comenzaba un período de 10 años de
trabajo junto a mí para los jóvenes.
17Está bien claro que no se limitaba a ser quien
cocinaba y lavaba la ropa los jóvenes tenían con
ella una confianza total, tan era el afecto que
los huérfanos se sentían queridos (Pascual
Chávez)
18Muchos jóvenes no tenían casa donde vivir, ni
familiares con los que hospedarse. Así comencé a
acogerlos en el oratorio.
19Al principio, los hospedados se fueron con la
ropa de la cama y todo lo qyue pudieron llevar.
20Varias veces intenté acoger más jóvenes, y
siempre con el mismo resultado. Mi madre y yo no
sabíamos que hacer...
21Hasta que llegó el momento preparado por Dios.
Después de tener un lecho preparado, se quedó con
nosotros un niño que no tenía donde dormir...
22- Esta noche vas a dormir aquí. Pero no hagas
como los otros que huyeron llevándonlo todo.
Mañana Dios proveerá... Y, antes de dormir,
recemos juntos.
23Así tuvo lugar el primer internado del Oratorio
de los primeros huérfanos abandonados comenzamos
con 15 en 1849, llegamos a tener con nosotros
cerca de 100 jóvenes en 1854.
24Un día la paciencia de mamá Margarita se acabó.
Su pequeña huerta, cultivada com tanto esfuerzo
y amor, estaba completamente destruida!
25- No aguanto más! Todos los días los miños
inventan alguna novedad... Déjame irme ahora.
Déjame volver al pueblo para acabar tranquila mis
días.
26Dicho esto, fijé mis ojos en mi madre. Depués
miré al crucifijo. Mi madre lo entendió -
Tienes tazón, tienes trazón!
27Desde ese momento, jamás salió de sus labios una
palabra de insatisfacción (Memórias
Biográficas)
28La vida de mi madre se confundirá con la mía en
la fundación de la obra salesiana
29Cuantas veces, para asegurarme que mis escritos
serían entendidos por todos, se los leía a mi
madre antes de mandarlos a la imprenta.
30Los consejos de mi madre me ayudaban y defendía
de muchos ataques de mis enemigos. Ella me
avisaba, pero...