Title: Mujeres invisibles
1Mujeres invisibles
- Awa, Ekra, Rachel, Jackie,
- Catherine... son mujeres,
- inmigrantes y negras. Triple
- discriminación.
- Miles de subsaharianas
- recorren durante años el
- camino hacia Europa,
- huyendo de la pobreza o la
- guerra.
- Información obtenida de 'El País
Semanal.Domingo 15 de febrero de 2009.
2Ekra A.K. Costa de Marfil, 30 años, su familia
fue asesinada, se prostituye para vivir.
- Hay personas sabias que en pocas palabras son
- capaces de definir el mundo. Una de ellas es Ekra
- A.K., de 30 años, de Costa de Marfil.
- "Qué haces para poder vivir?", le preguntamos
- en los seis metros cuadrados en los que habita en
- Rabat (Marruecos).
- Ella mira un segundo alrededor a las paredes,
- donde cuelgan pósteres de sus ídolos, las
- hiperblancas Shakira y Avril Lavigne a la
bombilla - lánguida y el ventanuco atrancado en lo alto al
- colchón oculto con telas y los vestidos que
- penden del techo a la tele y las cazuelas con
- verdura cocinada sobre la alfombra... Es todo. No
- cabe más en este espacio por el que paga 70
- euros al mes. Ni una gota de aire.
"Prostituirme", - afirma. "Dos euros por hombre una vez 20, la
- noche", dice esta mujer redondita y agridulce
- cuyo camino (tal como ellos llaman al viaje)
hacia - Europa se inició el día en que toda su familia
fue
3A este lado del estrecho. Entre los plásticos de
los invernaderos de Roquetas del Mar, en la
provincia de Almería, abundan los cortijos de
antaño, convertidos ahora en vivienda y lugar de
reunión y trabajo de muchas subsaharianas sin
papeles, condenadas también aquí a la
prostitución.
- En ese destino (España) con el que sueña Ekra hay
- personas como Happiness, veinteañera larga,
nigeriana - enérgica y que ha dejado atrás familia e hijo, un
país - complicado y denso, y ha conseguido atravesar
el - Estrecho para llegar hasta Roquetas de Mar
(Almería). - Trabaja y habita en uno de esos cortijos, antaño
de labranza y retiro - y hoy abandonados en los descampados encajados
entre los - plásticos o los bloques de pisos del boom
inmobiliario último ya - desinflado.
- Edificaciones en ruinas, ocupadas por inmigrantes
sin techo y ya - casi siervos gracias a la crisis económica (lo
indica la asociación - hispanoafricana Acciones Comunitarias
Almerienses, ACA). - Casas de una planta, con patio interior y
cuartos varios con - múltiples camas para poder simultanear el trabajo
sexual. - Allí conviven las chicas a las órdenes de la
madame, a la - que suelen pagar semanalmente 50 euros. En el
salón - hay siempre una tele encendida y sillas en
círculo para - los que allí se reúnen, subsaharianos -se
estiman - 25.000 en el gueto de los sin papeles en la zona-
sin otras
4En la frontera
- Ekra y Happiness son dos ejemplos de una
situación común poco - conocida. A saber, violación sistemática de
derechos humanos sólo - por ser mujer. A uno y otro lado de la frontera.
Explotación, trata, - prostitución. En todo el camino. De ello habla un
informe que se - presentará en Madrid estos días, realizado entre
2005 y 2007, por - un grupo de juristas, la organización Women's
Link Worldwide, - formada por mujeres empeñadas en la lucha contra
la - discriminación por cuestión de género y en su
defensa. - La idea nació cuando documentaban en 2005 en la
frontera de - Ceuta situaciones de violencia "Nos llamó la
atención que se - hablara siempre de hombres. Y dónde están
ellas?, nos - preguntamos. Y ellas estaban ahí mismo, en los
bosques, ocultas. - Incluso para hablarles había que pedirles la
palabra a ellos. Al final - pudimos acercarnos, comunicarnos más con las
francófonas que - con las anglófonas las nigerianas son
complicadas, muy - vulnerables...". Visibilizar lo invisible fue el
objetivo. Allí había - embarazadas, heridas, explotadas, devastadas (ver
- www.womenslinkworldwide.org). Mucho que contar.
Muchas - historias. Todas grandes.
5Jackie S. Congo, 18 años, dos hijas, cristiana.
- Jackie S., cristiana, de Bundulu, RDC, tiene 18
años, - dos niñas, Tracy y Kelsey, un rostro bellísimo y
triste, y - su vida habría sido más fácil de haber nacido
varón. - "Me obligaron a casarme con un hombre mayor
cuando - mi padre murió". Su marido la maltrató hasta la
saciedad - (enseña las marcas por el rostro, el pecho...).
"No podía - dormir con él, no podía... Quería un hijo cada
año, uno - tras otro".
- Y así. Huyó cuando su pequeña tenía dos semanas.
Ella - cruzó Centro África, Chad, Argelia, Malí... Un
amigo - comerciante la acompañó. Y desapareció luego.
"Les - sucede a todas, los maridos del camino se sirven
de - ellas, y cuando quedan detenidas en un punto,
ellos se - marchan a intentar cruzar es mejor intentarlo
solos". - Abandonadas a su suerte y con hijos, las
africanas, dice - Jorge Martín, coordinador de Médicos Sin
Fronteras en
6Blessing, nigeriana, 15 años, vive en Tánger en
un bajo sin ventanas con su hermano, paga 90
euros al mes
- "Horror sobre el horror", dirá luego Javier de
Lucas, - presidente de la Comisión Española de Ayuda al
- refugiado (CEAR), al referirse a la situación de
las miles - de subsaharianas atrapadas en Marruecos o en
Libia, - convertidos ambos países ya en frontera de
control de la - UE (externalización, lo llaman unos cancerberos,
otros). - Explican en CEAR el contexto migratorio general
- "Desde un punto de vista político, las fronteras
europeas - se están trasladando hacia el Sur (norte de
África) y el - Este (Ucrania, Moldavia...). Esto se está
haciendo de - forma sutil, a través de acuerdos de cooperación
los - Gobiernos occidentales ofrecen grandes cantidades
de - dinero de la cooperación para que los fronterizos
- gestionen los flujos migratorios. El problema es
que - éstos no saben gestionarlos, los policías no
tienen - formación (expulsan sistemáticamente hacia
Argelia y - sin examinar a personas susceptibles de asilo) y
7La mujer en el camino
- A Women's Link Worldwide le interesaba saber los
detalles de - una travesía extrema desde el punto de vista de
las mujeres, un - camino entre 2.000 y 6.000 kilómetros de
distancia y dos años de - tiempo medio. Realizaron 130 entrevistas donde
preguntaron desde - los datos básicos de cada mujer (edad, origen,
etnia, religión) hasta - los motivos para realizar el viaje.
- Motivos "Pobreza, matrimonios tempranos, guerra,
violencia", fue la - respuesta.
- Tiempo de duración dos, tres años de media, a
pie o en camión. - Guerras vividas frecuentes.
- Familiares inmigrantes a menudo, y les ayudan a
pagar el viaje a la - red.
- Ayudas recibidas suelen unirse a los llamados
maridos del camino, - lo que significa protección ante otros a cambio
de hacer de esposa. - Otras veces son protegidas de traficantes con los
que adquieren - deudas que deben pagar al llegar a Europa.
- Medios para buscarse la vida mendigar o
prostituirse. - -"No sé cuantas veces he abortado, me dan cosas
para perder el - bebé y me drogo para soportar el dolor".
8En Marruecos, quedan retenidos miles de
subsaharianos que, a la espera de cruzar a
España, se hacinan en barrios de Rabat,
Casablanca y Tánger
- Ahora, el campo y los suburbios urbanos
marroquíes son - parada final para muchas mujeres.
- Se calcula entre 5.500 y 7.000, muchos
escondidos, - los subsaharianos llegados a Rabat, Casablanca y
- Tánger. "Es población móvil, pero el número es
estable - entre salidas y llegadas y cada vez hay más
mujeres y - más jóvenes".
- Awa K., 25 años, dos hijos (Ismael, de tres años
- Beyoncé, de uno), nacidos en un hospital pero sin
que - conste venir al mundo en este territorio no
significa - nada, no da ningún derecho si no puedes pagar el
- certificado de nacimiento"Tienes suerte si te lo
- consigue una ONG, pues, por ejemplo, vacunarles
no es - posible sin él". Awa, delgadísima, juega con sus
retoños, - ajenos a todo, y cuenta que vive desde hace un
lustro - aquí y su situación es desoladora pide por las
calles, - coge lo que encuentra, busca quien le dé algo por
lo que - quiera que sea que ella tenga u ofrezca. Su
mirada es - tremenda, herida. "El padre de las niñas nos
abandonó".