Title: 33 domingo -B-
1Nuestro futuro está ya en nosotros, en el camino
que vamos construyendo día a día.
Marcos 13, 24-3233 domingo B- 19 de noviembre
de 2006
224 Pasada la tribulación de aquellos días, el sol
se oscurecerá y la luna no dará resplandor 25
las estrellas caerán del cielo y las fuerzas
celestes se tambalearán.
Jesús siempre es Buena Noticia. No se trata de
una descripción angustiosa, sino esperanzadora.
La victoria de Cristo es segura a pesar de
todos los sufrimientos y desgracias. Más
importante que el miedo ante el futuro es el
ánimo para el presente. Jesús es un ejemplo
viviente de este valor para vivir. Nos invita, a
la confianza, al trabajo, a la vigilancia y a
la seriedad en nuestro camino.
326 Entonces verán venir al Hijo del Hombre entre
nubes con gran poder y gloria 27 Él enviará a
los ángeles y reunirá de los cuatro vientos a sus
elegidos, desde el extremo de la tierra hasta el
extremo del cielo.
El que vendrá como Juez es el mismo en quien
creemos, a quien escuchamos, en quien confiamos,
a quien intentamos seguir. Nuestra vida está
orientada hacia nuestro encuentro con Jesús. Nos
promete lo que no nos atreveríamos a soñar ni
imaginar nos llama a un futuro de inmortalidad y
de felicidad. Su triunfo definitivo implica
también nuestro triunfo.
428 Fijaos en lo que sucede con la higuera. Cuando
sus ramas se ponen tiernas y brotan las hojas,
conocéis que se acerca el verano. 29 Pues lo
mismo vosotros, cuando veáis que suceden estas
cosas, sabed que ya está cerca, a las puertas.
Aunque a veces sintamos otoños en nuestra vida,
por seca que nos parezca a veces nuestra
higuera, tenemos la seguridad de que pronto las
ramas se pondrán tiernas, brotarán las yemas....
Llegará nuestro Verano.
530 Os aseguro que no pasará esta generación sin
que todo esto suceda. 31 El cielo y la tierra
pasarán, pero mis palabras no pasarán. 32 En
cuanto al día y la hora, nadie sabe nada, ni los
ángeles del cielo ni el Hijo, sino sólo el Padre.
Lo importante no es saber "cuándo" y "cómo"
sucederán estas cosas del final, ni para el
cosmos ni para la humanidad ni para cada uno de
nosotros.. Las cosas que ocurrirán al final del
mundo, o en el momento de nuestra muerte, ya nos
están sucediendo día a día.
6Tú conoces mi alma, Tú sabes todo lo que es
precisohacer en ella. Hazlo a tu modo. Atráeme a
Ti, Dios mío. Lléname de puro amor a Ti. No
permitas que jamás me aparte del camino de tu
amor. Muéstramelo con claridad. Lo dejo todo en
tus manos. No tendré miedo de nada, porque estaré
siempre en tus manos y jamás de dejaré y jamás me
dejarás. Thomas Merton
Amén