Title: Presentaci
1B. LOS PRINCIPIOS DE INTERPRETACIÓN (LA
HEURÍSTICA BÍBLICA)
Los principios principales están en la DV 12
Habiendo hablado Dios en la Sda. Escritura por
hombres y a la manera humana, para que el
intérprete de la Sda. Escr. comprenda lo que El
quiso comunicarnos,
debe investigar
con atención lo que preten-
dieron expresar
realmente los
hagiógrafos y plugo a Dios
manifestar con las
palabras
de ellos.
2Siguen los principios de la DV 12
Para descubrir la intención de los hagiógrafos,
entre otras cosas hay que atender a los géneros
literarios.
Y como la Sagrada Escritura hay que leerla e
interpretarla con el mismo Espíritu con que se
escribió, para descubrir con exactitud el sentido
de los textos sagrados, hay que atender no menos
diligentemente al contenido y a la unidad de toda
la Sagrada
Escritura, teniendo en
cuenta debidamente la
Tradición viva de
toda
la Iglesia y la analogía
de la
fe.
3CAPÍTULO I
LOS DOS PRINCIPIOS
FUNDAMENTALES
1. Estructura orgánica de los principios de
interpretación
En la DV12 vimos tres párrafos. El 2º es un
desarrollo del 1º. Así que los dos principios
fundamentales de interpretación estaban en el
primer y tercer párrafo. Sobre estos dos pilares
se apoyan los demás criterios metodológicos.
1 Principio Deus in sacra Scriptura per homines
more hominum locutus est.
42. Principio Sacra Scriptura eoden Spiritu quo
scripta est etiam legenda et interpretanda est.
La 1ª fórmula es de un texto de san Agustín (De
civitate Dei 16,2). La 2ª es de san Jerónimo
(Comentario a Gal 5,19-21).
Esta 2ª estaba
ya en la Spiritus Paraclitus.
De estos dos principios proceden dos grupos de
criterios, unos conside-rando que han intervenido
autores humanos, y otros considerando al autor
divino.
Los dos están entrelazados y esta fuerte unión
entre los dos la establece la Dei Verbum.
5La frase de la Dei Verbum se debe tener en
cuenta con no menor diligencia, une y crea una
relación entre los criterios del primer y tercer
párrafos. Pero en la forma como se enuncian hay
una clara referencia al origen divino de la
Sagrada Escritura.
Dos frases importantes en la DV Dios ha
hablado y con su Espíritu han sido escritos los
libros sagrados
Por lo tanto subraya que los textos bíblicos
tienen un origen divino.
6El primer principio Dios ha hablado a los
hombres en lenguaje humano.
Aquí se marcan tres principios -Origen divino de
la Escritura. -Autoría del escritor
inspirado -Principio de intencionalidad.
Sobre la importancia de indagar
en la intencionalidad
divina y
humana la Dei Verbum hace referencia para la
comprensión del texto.
La intencionalidad divina y humana se entrelazan
hasta formar una única intencionalidad, aunque
haya diferencias.
7Para comprender mejor la intencionalidad del
hagiógrafo, el 2º párrafo que vimos de la DV12 se
refiere a que atendamos al estudio de los géneros
literarios
El segundo principio la lectura en el Espíritu
Distinguimos dos órdenes de criterios
-Respecto a la actitud del intérprete La
S.Escritura hay que leerla e interpretarla con el
mismo Espíritu con que se escribió DV 12.
- Respecto al objeto de estudio Se debe tener
en cuenta el contenido y la unidad de toda la
Escritura, y también la Tradición viva de toda la
Iglesia y la analogía de la fe.
82. El substrato teológico de los principios de la
hermenéutica bíblica.
El método exegético. Por los principios
presentados, derivados de la DV 12, vemos que la
exégesis debe ser considerada una verdadera
ciencia teológica.
Esto es porque la teología se ocupa de la verdad
revelada, sobre lo que nos ha manifestado Dios.
Por lo tanto la hermenéutica debe adoptar los
métodos propios de la teología, aunque
manteniendo su peculiaridad de ciencia positiva
para examinar los textos.
9El método teológico busca fundamentar sus
afirmaciones en la autoridad de Dios que revela,
y penetra en el contenido de la revelación con la
razón iluminada por la fe.
Los pilares del método teológico son la fe, la
autoridad de Dios y la razón iluminada por la fe.
La teología distingue entre los criterios
-Los específicos o dogmáticos de la ciencia
teológica. Por ellos es posible conocer la
autoridad de Dios que revela.
-Los que pertenecen al ámbito de la razón,
respetando las exigencias de la fe razón
iluminada por la fe.
10El método exegético debe desarrollar la propia
investi-gación con una adhesión constante a la
verdad salvífica.
Como ciencia teológica requiere criterios que
permitan establecer el querer y la
intencionalidad divina.
Como ciencia específica, la exégesis debe
utilizar los me-dios que el progreso científico
pone a disposición del hom-
bre estudio textual, literario
e histórico, a
la luz de la fe.
La exégesis, ciencia teológica positiva, debe
integrar técnicas del análisis textual en una
vi-sión de fe que tenga en cuenta la unidad de la
Biblia, la Tra-dición y la analogía de la fe.
11Una metodología única y un único acto
hermenéutico.
En la hermenéutica católica hay reglas propias y
reglas comunes de interpretación. Se pueden
llamar reglas específicas y racionales.
Las propias provienen de que la Escritura es de
origen divino y tiene un contenido sobrenatural.
Las comunes viene de que es un libro que tiene
autor humano y se presenta de modo humano. Por
eso es común como cualquier otro libro escrito
por hombres.
Estas reglas se llaman racionales, porque la
razón ejerce una función proporcionada a ella.
12Las reglas de interpretación propias y comunes no
pueden considerarse de modo separado, con tareas
independientes.
Esto es porque es un libro divino-humano
inspirado por Dios y escrito por medio de los
hagiógrafos.
Las reglas de interpretación deben seguir las
exigencias del objeto de investigación y la
relación que la teología establece entre fe y
razón.
Las reglas comunes se deben aplicar a la Biblia
de modo peculiar la razón debe intervenir en el
campo de la fe, sin perder su propia autonomía,
pero guiada por la fe. Contribuye a conocer la
verdad salvífica, que supera la capacidad humana.
13Metodología exegética e inspiración bíblica.
Como el hagiógrafo es un autor inspirado, el
contenido intencional de sus escritos corresponde
al contenido intencional de Dios. Por eso las
reglas para conocer las intencionalidades sirven
una para la otra.
El texto de la Biblia es inspirado. No es un
texto simplemente arqueo-lógico, sino un texto
vivo, enraiza-do en la Tradición viva de la
Igle-sia, que exige una actitud de escu-cha para
abrirse a la comprensión.
Esto se debe tener en cuenta en las tareas de
tipo filológico, literario, histórico...
14Esta actitud hermenéutica no elimina el esfuertzo
intelectual de búsqueda, pues la fe requiere
siempre el ejercicio de la razón, según el
adagio fides quaerens intellectum.
Así pues, la exégesis requiere que el intérprete
aplique en una única perspectiva las reglas y
criterios hermenéuticos que corresponden tanto al
ámbito de la razón como de la fe.
15No es admisible para una visión católica la
división, a partir de Gabler, de exégesis
dogmática y crítica.
Por el hecho de que ni con sola la fe ni con sola
la razón se puede hacer teología.
La única metodología adecuada es Deus in sacra
Scriptura, per homines, more hominum, locutus est.
Esta fórmula reclama la unidad de la Biblia y la
unidad del método a seguir para conocerla.